Por Sandra Olive
Todos sabemos que el home office llegó para quedarse. El gran desafío de las empresas es cómo implementar un sistema híbrido que permita impulsar el balance de vida mientras también desarrollamos cultura dentro de las organizaciones.
Se suma el gran turnover como producto de la pandemia y la pérdida de talento clave.
La pandemia obligó a muchísimas compañías a tomar decisiones rápidas sobre cómo implementar metodologías de trabajo para poder seguir funcionando a pesar de tener a todos los empleados staff sentados en casa. Eso funcionó y en muchos casos se logró hasta ser más productivo.
Hoy, ya saliendo del túnel de la falta de certeza sobre cómo se desarrollaría la pandemia, nos encontramos con un nuevo escenario laboral, que trae una nueva falta de certeza.
Eso es: Cómo se puede hacer para afianzar el contrato psicológico de los colaboradores en el nuevo contexto donde los colaboradores son, en muchos casos, empleables en cualquier parte del mundo.
El gran desafío de las organizaciones es poner al colaborador en el centro. Es decir, poder tornarse, además de client centric, a ser employee centric. Y eso qué es? Significa reconocer que el mercado de talento es tan mercado como el mercado de los productos y servicios. Y requiere su diseño y marketing al igual. Antes uno tomaba gente para la organización pensando “le voy a dar X” pero hoy en día hay que pensar también en qué quiere el colaborador y qué cosas van a pesar en su ecuación a la hora de terminar de decidir si se suma a trabajar a la empresa Y.
Para poder convertirse un una organización employee centric, y por ende un lugar más atractivo para el capital humano, hay que tomar en cuenta 7 temas fundamentales y desarrollarlas en profundidad dentro de la organización:
- Priorizar el bienestar de la gente
- Ver al capital humano como consumidores
- Trabajar fuertemente en la experiencia del colaborador
- Pedir y brindar feedback – y luego actuar sobre el feedback
- Promover el bienestar psicológico
- Mejorar el paquete de compensaciones y la estrategia para ser cada vez más atractivos
- Empoderar al capital humano para que pueda crecer y desarrollarse constantemente
Todo esto genera la “marca empleadora”: las generaciones más jóvenes hoy tiene valores muy arraigados. Como por ejemplo la transparencia, el respeto por la diversidad, la ética y la sustentabilidad de la organización entre otras. Son más atractivas aquellas organizaciones que comulgan con sus valores profundos y le dan un sentido a su trabajo. Ya no es un contrato de “hago tal tarea y recibo tal ingreso” sino que juega un rol muy importante la huella que deja esa organización en el mundo y la sociedad.
Cuantas cosas, no? Pero eso es transformarse – no quedarse quietos y siempre pensar en hoy soy mejor que ayer pero peor que mañana.
De los gigantes Fortune 500 del pasado ya quedan pocos, fue porque no supieron escuchar y adaptarse al mercado y a las necesidades de la sociedad en general. Quedaron poco atractivos y ce convirtieron en obsoletos.
Depende de nosotros, qué podemos hacer cada uno de nosotros para impulsar el cambio?